RUTA DE LAS XANAS (XANES)

Continuo el blog con otra ruta en Asturias, y dejo las de León, por ser más largas para más adelante.
En principio, había previsión de lluvia y no llevé a los niños, de lo cual me arrepentí después, porque es una ruta sencilla, con poco desnivel, apenas anduvimos 8 km. incluso se pueden recortar a 7, y una buena parada a medio camino. Más que una ruta, me parece un paseo.
Desde León, hay 125 km. hasta Villanueva, en Asturias, en la carretera de Proaza y Teverga (otro día hablaremos de la senda del oso en BTT).

Comenzamos la ruta con una pequeña pendiente por carretera, pero enseguida se nivela y se hace muy sencilla.

Este es el grupo de hoy, Noe, que no me abandona, Marta, Fran y Sol. Parece que no, pero ir con gente a la que quieres y aprecias, revaloriza la ruta y el día, en este caso, estas personas, le dieron un valor extra que convirtieron el día en un tesoro a guardar para siempre.

Al principio de la ruta, el camino todavía nos permite ver el lugar donde hemos aparcado.

Luego, discurre por lugares que recuerdan a la ruta del Cares, de hecho, se la denomina el "pequeño Cares".

En otros momentos, el sendero discurre por la ladera.

Y finalmente, vamos adentrándonos en el bosque de las Xanas (Xanes, hadas). donde el paisaje te embarga y te transporta, donde notas que es un lugar mágico y maravilloso, que hace que te detengas y disfrutes.

Voy de rojo por si me pierdo.

 Luego, continuamos por el sendero, que sigue siendo espectacular.

 Y nos encontramos ese tipo de puentes de madera que dan encanto a todas las rutas, aunque este tenía la madera en malas condiciones.

Finalmente, tomamos la opción más larga, y llegamos al pueblo de Pedroveya, desde este camino.

 Nos encontramos el tejo que guarda la entrada a la ermita, un poco seco, pero estamos contentos de llegar y nos vamos al pueblo al bar, casa Generosa, a tomar un par de sidras, también se puede reservar para comer, pero me pareció que había demasiada gente.

 Regresamos por el camino corto, y nos dimos cuenta de que éste era muy corto, pero igual de bonito.

Al final no ha llovido, y eso que era en primavera. Ha sido una ruta corta y descansada, ideal para realizar con niños.  El tramo que se parece a la ruta del Cares, carece de peligro,  a pesar de las apariencias, un poco de cuidado con lluvia y si se va con perro o con niños.
Al final de la ruta, tenemos un bar, y allí nos encontramos con que el aparcamiento está abarrotado, lo que no extraña. 
Un premio fantástico para tan poco esfuerzo, que desde León, es un rato, pero que desde Oviedo, la verdad, es un paso, y me parece una ruta preciosa.
Como en la anterior, he preferido prescindir de track, y seguir con la filosofía de que una imagen vale más que mil palabras, y confirmar que la buena compañía, hace de estas jornadas un tesoro.
Gracias por visitar el blog y un saludo para todos.